La estación de otoño es una estación donde las temperaturas comienzan a descender, los terrenos se hacen húmedos, y el ambiente favorece el desarrollo de hongos, gérmenes o microorganismos, gusanos y cualquier agente infeccioso que dará dolores de cabeza al mantenimiento de nuestras plantas del jardín, restando toda su belleza y característica del nuevo color que aportan. En otoño las plantas sufren transformaciones propias y naturales de la estación como recurso para su subsistencia en las estaciones venideras. La planta misma se autorregula y combina las energías y nutrientes entre sus hojas, raíces y flores. Previo a la llegada de otoño guarda toda su energía en las hojas y flores, y las raíces las aprovecha durante esta estación, por eso observamos que las hojas van cambiando de verdes a amarillas pasando por una gama de naranjas y ocres muy hermosos también; y las hojas una vez caducas se caen naturalmente ayudadas por el viento.
Es una época donde todo se torna entre colores amarillos, naranjas, marrones y ocres, muy hermosos en la gran variabilidad de tonos; esto hace del paisaje y jardín un atractivo que hay que aprovechar. Sin embargo, existen tips particulares e importantes que debes considerar de manera especial para el mantenimiento de las plantas de tu jardín ya que es una estación con bastantes factores que intervienen en la degradación de las mismas: 10 son los tips más importantes a considerar:
1.- Cuando comiences a observar pérdidas de hojas por el otoño, poda las flores y hojas marchitas y aprovecha colocarlos en algún compost que estés preparando; aumentará su materia vegetal tan importante para su elaboración.
2.- Si es posible y el clima que presentas tiene vientos frecuentes, cambia tu planta al interior de tu casa si las tienes en macetas.
3.- Permite que las hojas caigan naturalmente, solas o por efectos de algún viento leve; el retirarlas por movimientos fuertes de un lado para otro porque dejará heridas en la inserción de las hojas por lo que serán atacadas por las bacterias y los hongos y la enfermará.
4.- Las hojas caídas debes limpiarlas y no dejar que se depositen en gran extensión, el arropar el terrero en hojas secas quitará luz solar y no permitirá oxigenación del terreno por lo que la proliferación de microorganismos fúngicos, de bacterias y gusanos atacarán el jardín. Puedes recurrir a productos antifúngicos o antihongos y germicidas comerciales para protección del terreno.
5.-La maleza que caiga hay que eliminarlas y arrancarlas pues son buenos competidores por el agua y nutrientes del terreno. También puedes recurrir a productos comerciales para eliminar las posibles semillas de hierba malas.
6.- Si tienes plantas aromáticas, recuerda que debes podarlas para volver a tener en su momento buenas flores y disfrutar nuevamente de su aroma.
7.- Si tienes brotes de alguna planta, en especial de las trepadoras, coloca algún soporte para que tenga mayor firmeza y apoyo para su crecimiento y excelente desarrollo.
8.- Abulta el terreno, airea la tierra con un rastrillo, abomba y acolcha el terreno para evitar que tus plantas y arbustos pueden secarse y helarse. Preserva el terreno húmedo, pero no compacto; esto permite la proliferación de microorganismos.
9.- El riego de las plantas deben ser espaciados poco a poco considerando las lluvias que naturalmente le favorecen.
10.- Es importante también considerar los muebles que utilizas en tu jardín en esta época del año ya que forman parte del mismo tanto como las plantas. Cuídalos y protégelos de la humedad, no permitas que se mojen, protege con telas impermeables; y aprovecha ciertas hojas color ocres, amarillos fuertes y naranjas para realizar creativamente recursos decorativos que harán del espacio muy otoñal, bello y espectacular.