Paso a paso de la siembra de lirios

Los lirios son la mejor opción para jardines pequeños como para jardines grandes. Le dan un toque de glamur y sutileza  inigualable. Aunque, que sean lindos, no significa que sean sencillos de cultivar, pero tampoco es difícil.
Los lirios, son la clase de plantas que pueden resistir y/o adaptare a cualquier tipo y cambio de clima. Son plantas que pueden tolerar la fuerte sequía. Son flores duraderas y de pocos cuidados. ¿Quieres saber cómo se lleva a cabo paso a paso de la siembra de lirios?

Paso a paso de la siembra de lirios
Para tener una siembra preciosa de estas flores, debes recordar que los lirios son resistentes a varios factores; pero dependiendo del clima y el lugar donde desees plantarlos intenta buscar una especie de la flor adecuada a cierto tipo de suelo, por ejemplo.
Los lirios siberianos son adecuados para climas templados. Son fáciles de cultivar, al contrario, los lirios de lusiana, son de climas más cálidos, no florecen con mucho éxito si reciben menos de una pulgada de agua. Los lirios barbados, son una especie que  puede recibir muy bien los rayos de la luz solar durante todo el día, se adaptan al calor y no necesitan con persistencia la luz natural.
La mayoría de los lirios pueden florecer maravillosamente con una leve cantidad de luz solar día a día. No es necesario que estén expuestas constantemente, aunque si se te olvida, no corres ningún tipo de efecto secundario porque estos seguirían creciendo en esa situación.  ¡Aquí te contamos como ejecutar eficazmente paso a paso de la siembra de lirios! 

Planta en suelos de tierra ligera.
Plantarlos en un tipo de suelo que contenga tierra ligeramente ácida y con un buen drenaje es la clave. Los lirios responden muy bien a la tierra de neutra y con un ácido ligero. Los lirios necesitan tierra aireada, con buena filtración de agua. Es importante ya que así las raíces corren menos probabilidades de pudrirse por un exceso de agua. 

Puedes acondicionar el suelo.
Para los suelos con tierras duras o material arcilloso, se puede obtener un mal drenaje. En esos casos, agrégale humus o cualquier materia orgánica para que este se permeabilice.
Si no tienes estas opciones a la mano. Puedes crear un cultivo aéreo o elevado, así en casos con excesos de agua, esta se eliminará de manera natural.


Planta el rizoma con la parte de arriba expuesta
    Evita cometer el error de sembrar lirios en una gran profundidad. La  mayoría de las planta lo necesitan, pero los lirios florecen mucho mejor cuando la estructura marrón de la base está expuesta al aire libre.
Siembra con un espacio considerable entre ellos.
Si se siembran muy juntos, los lirios pueden crecer muy diferentes a otras flores, creciendo todos amontonados, uno encima del otro. Cuando esto sucede las plantas tienden a combatir por más espacio en la tierra y obtención de nutrientes; esto ocasiona un mal germinado de las demás. Para evitar eso, siembra los lirios dejando un espacio de un pié como mínimo entre cada una.

Riega los lirios
Una vez hayas sembrado, si es un clima de constate sequía, riega con una buena cantidad de agua cada ocho días a las horas de la mañana o por la noche. No riegues los lirios de manera constante ya que así las raíces se pueden pudrir por el exceso de agua y suelo húmedo.
A medida que estos vayan germinando, su necesidad de agua irá disminuyendo. Aunque, si vives en un lugar muy seco debes regarlos una que otra vez.

Limpia las flores.
Los lirios no necesitan grandes podados para estar sanos en su crecimiento. Al contrario de otras flores, estos adquieren los nutrientes de las que se van secando, en ese caso solo tendrás que limpiar la que ya están seca y las que están marchitas ya que materia muerta no le funciona nada bien.