Es posible que la Campanula esté experimentando algunos problemas relacionados con las condiciones ambientales o el cuidado. Aquí hay algunos consejos para ayudarte a resolver los problemas de floración:
Luz y temperatura: Las Campanulas generalmente prefieren la luz solar parcial y las temperaturas frescas. Si la planta está recibiendo demasiada luz solar directa o si la temperatura ambiente es demasiado alta, esto puede afectar su capacidad para florecer. Trata de mover la planta a un lugar con más sombra y donde la temperatura sea más fresca.
Riego: Las Campanulas necesitan un riego regular, especialmente durante los períodos de calor y sequía. Verifica que la planta esté recibiendo suficiente agua, pero no en exceso, ya que un exceso de humedad puede provocar el marchitamiento y la pudrición de las raíces. Asegúrate de que la tierra esté bien drenada.
Fertilización: La falta de nutrientes también puede afectar la capacidad de la Campanula para florecer. Trata de fertilizar la planta regularmente con un fertilizante equilibrado para plantas con flor según las instrucciones del producto.
Poda: La poda regular de las flores marchitas puede estimular la producción de nuevas flores. Cuando las flores se marchitan, recórtalas de vuelta hasta el siguiente conjunto de hojas o brotes laterales.